Santo Domingo.- El Banco Central de la República Dominicana (BCRD), en su reunión de política monetaria de agosto de 2024, decidió reducir su tasa de interés de política monetaria (TPM) en 25 puntos básicos, disminuyendo de 7.00 % a 6.75 % anual. Asimismo, la tasa de la facilidad permanente de expansión de liquidez (Repos a 1 día) pasa de 7.50 % a 7.25 % anual, mientras que la tasa de depósitos remunerados (Overnight) se reduce de 5.50 % a 5.25 % anual.
Para esta medida se tomó en consideración la evolución reciente del entorno internacional, particularmente las expectativas de flexibilización de las condiciones financieras internacionales. Adicionalmente, se ponderó el buen desempeño de la economía dominicana y la moderación gradual del ritmo de expansión del crédito privado, en un contexto en el cual la inflación se ha mantenido durante el presente año en el tramo inferior del rango meta de 4.0 % ± 1.0 %.
En efecto, la inflación interanual en la República Dominicana ha disminuido significativamente, ubicándose en 3.54 % en julio de 2024. De igual forma, la inflación subyacente, que excluye los precios de los componentes más volátiles de la canasta y que se asocia más directamente a las condiciones monetarias, se mantiene en torno al centro de la meta, al ubicarse en 3.90 % en julio de 2024. Los modelos de pronósticos del BCRD señalan que tanto la inflación general como la subyacente se mantendrían dentro del rango meta de 4.0 % ± 1.0 % en el horizonte de política monetaria, en un escenario activo de política monetaria.
Con esta decisión de reducir la TPM, la tasa de interés de referencia acumula una disminución de 175 puntos básicos desde mayo de 2023. En este periodo, el BCRD implementó un programa de provisión de liquidez, a través del cual los intermediarios financieros han canalizado préstamos por más de RD$199 mil millones al sector privado, a tasas de interés de hasta 9.0 % anual. Adicionalmente, el BCRD ha estado promoviendo el uso de las facilidades permanentes de liquidez por parte de las entidades financieras, ampliando los plazos de los reportos del BCRD.
En el entorno internacional, la economía de Estados Unidos de América (EUA) se mantiene resiliente, proyectándose un crecimiento de 2.5 % para el año 2024, de acuerdo con Consensus Forecasts. En tanto, los indicadores del mercado laboral han continuado moderándose y la inflación interanual se desaceleró hasta 2.9 % en julio de 2024. Ante este escenario, se prevé que la Reserva Federal inicie un proceso de recortes de su tasa de referencia en la próxima reunión del mes de septiembre.
En la Zona Euro, se espera que la actividad económica registre un crecimiento de 0.8 % en el año 2024, según Consensus Forecasts, afectada por los conflictos geopolíticos. Por otro lado, la inflación interanual se ubicó en 2.6 % en julio, acercándose a su meta de 2.0 %. En este contexto, los analistas del mercado esperan que el Banco Central Europeo reanude su programa de reducción de tasas de interés en su reunión de septiembre.
En América Latina, la inflación ha permanecido dentro del rango objetivo en casi todos los países, aunque se ha observado un repunte en algunas de las economías de mayor tamaño. En ese sentido, los bancos centrales han disminuido sus tasas de política monetaria desde niveles que llegaron a ser de doble dígito en la mayoría de los países de la región. Específicamente, las reducciones en las tasas de referencias desde el año 2023 son: Chile (550 puntos básicos acumulados), Costa Rica (425), Brasil (325), Uruguay (300), Colombia (250), Paraguay (250), Perú (225), República Dominicana (175) y México (50).
En cuanto a las materias primas, persiste la volatilidad en el precio del petróleo intermedio de Texas (WTI), aunque se moderó a aproximadamente US$76 por barril al cierre de agosto. En tanto, el costo de transporte de fletes permanece elevado, ante los conflictos geopolíticos en el Medio Oriente y los factores climáticos que continúan afectando rutas importantes para el comercio mundial de mercancías.
En el ámbito nacional, la actividad económica alcanzó un crecimiento promedio de 5.0 % durante enero-julio de 2024, cercano a su potencial; luego de una expansión de 4.8 % interanual en el mes de julio. En este contexto, se espera que la economía dominicana sostenga un crecimiento en torno a 5 % en el año 2024, una de las expansiones más altas de la región, según organismos internacionales como el Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco Mundial y la Comisión Económica para América Latina (CEPAL).
Por otro lado, el ritmo de crecimiento del crédito privado en moneda nacional ha continuado moderándose gradualmente al ubicarse en torno a 15 % interanual. En ese sentido, las tasas de variación de los préstamos privados y de los agregados monetarios más amplios han mantenido una convergencia paulatina al crecimiento del PIB nominal, de acuerdo con lo previsto en el Programa Monetario del Banco Central.
En tanto, las actividades generadoras de divisas continúan registrando un comportamiento favorable, destacándose el turismo, las exportaciones de zonas francas, las remesas y la inversión extranjera directa. En ese contexto, se ha mantenido la estabilidad relativa del tipo de cambio, mientras las reservas internacionales se ubicaron en torno a US$15,300 millones en julio, equivalente a alrededor del 12 % del producto interno bruto (PIB) y unos seis meses de importaciones, superando las métricas recomendadas por el FMI.
Es importante resaltar que la economía dominicana cuenta con fuertes fundamentos macroeconómicos y un sector productivo resiliente, que se reflejan en una mejor percepción de riesgo país en los mercados internacionales. El Banco Central de la República Dominicana seguirá monitoreando la evolución de la economía con el objetivo de continuar adoptando oportunamente las medidas necesarias para preservar la estabilidad macroeconómica y que contribuyan a que la inflación se mantenga dentro del rango meta.